Casi siempre hablo en este blog de cosas que me disgustan, de cosas que quisiera cambiar, ya alguien ha dicho que este sitio a logrado sacar los lados oscuros de todos nosotros, en mi caso los lados grises, ya que los oscuros me los guardo muy bien, pero que quieren, también tengo mis lados vulnerables y estas fechas logren sacarlos.
Paso la navidad, y fuera publicidad, religión y consumismo, es una fecha que disfruto por ser la única oportunidad del año de convivir con mis familiares distantes al mismo tiempo, disfruto el teatro del nacimiento y el numerito del árbol, el pavo que siempre sobra y te chutas por cuatro días y el bacalao, las botellas de cava y las platicas largas y nostálgicas, la desvelada etílica y los villancicos cómicos del tipo, “aquí no vendemos tunas dejen de joder que le llamo a la afi, se los van a cojeeeer” etc. Pero sobre todo disfruté, que otra vez estemos todos, casi todos, juntos reunidos aunque sea una vez al año. Quedan como siempre afectos lejanos, ausencias tristes a las que solo queda guardar un espacio en la mesa y una copa servida, pero los que estamos, los que somos aun, celebramos el reencuentro anual, que ya por lo menos es algo.
Una semana después, el día de hoy, harto ya de tortas de pavo, sándwich de pavo, flautas de pavo y bebidas sabor pavo and gravy, jaja. Y con le hígado ya mas repuesto, estoy listo para despedir el año, que haciendo un recuento me ha pintado bien.
He recobrado contacto con amigos queridísimos lo sepan o no, aunque sea a través del frió Internet, he cumplido la mitad de propósitos de año, que ya es mucho decir, he madurado un poquito, solo un poquito y puedo decir que no terminare este año igual de idiota que cuando lo empecé, he vuelto a escribir, aunque sean sandeces gracias a este blog, a llegado a mi familia una relativa calma después de una tormenta y tengo fuera de la gripe, la sífilis el lupus y la diabetes juvenil, salud. Reí, llore, ame odie, al final puedo decir que viví este año sin escapar de una sola experiencia que se presento a mi paso He cumplido muchos sueños este año y he visto morir muchos otros, pero han nacido muchos mas que quedaran para el año siguiente.
Se que mañana cuando el reloj marque las 12 nada substancial cambiara, que es solo una línea cronológica imaginaria pero también es un buen momento para detenerse y mirar lo que se lleva recorrido, analizar los baches y crear rutas para no volver a cruzarlos, o ya de plano para trazar nuevos caminos y sobre todo para agradecer si es que hay un ser superior y si es que se cree en el , que las personas que quieres sigan contigo, que estén bien y por eso brindare mañana, sea cual sea el reloj que marque las doce, este donde este, brindare, si tengo con que, por todos ustedes, por mi familia y por mis amigos, para que su balance al final de cada año sea mas positivo que el anterior. Salu y Feliz año.
HOMERO
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