Hoy hablaré de algo chistoso que me pasó en mis días universitarios, quizás muy poca gente le ha pasado, por lo que siento que a más de alguno le puede interesar esa clase de experiencias, y mas al ver que en nuestro blog se ha puesto de moda las rarezas y los lados oscuros de cada uno.
Lo recuerdo y me da mucha risa aun, era viernes, se avecinaba una extensa investigación de la historia de la macroeconomía, me encontraba con Nayely en la biblioteca cual vil nerd en día de fiesta.
Comenzamos a buscar libros, demasiados, por cierto, y ninguno parecía llenar nuestras expectativas. De pronto, ahí estaba, el tan ansiado libro con todo el material requerido, no teníamos que buscar mas, pero... solo había uno, no teníamos credencial y seguramente nos lo iban a ganar si regresábamos otro día (las ñoñas del salón seguro lo iban a sacar e íbamos a quedar a expensas de su compasión), así que....qué puede hacer uno en esos casos???? La respuesta es simple.... robarlo.
Yo dije, mmmm hay que quitarle el código de barras para que no lo detecten los aros de metal, todo parecía sencillo, mi abrigo era lo suficientemente grande como para que nadie percibiera mi acción, ella dijo... va, y de inmediato nos dirigimos a la salida.
Ella pasó primero, yo al último, en cuanto pasé por el detector, sonó como ambulancia, en mi mente todavía existía la esperanza de que algún wey hubiera tratado de robar y que no le haya quitado el código como yo, pero cuando volteé, no había nadie, sólo el responsable de paquetería el cual me interrogo y me pidió que volviera a pasar, entonces volvió a sonar y tuve que sacar mi amado libro sostenido por mi cinturón.
Desgraciadamente no había un plan B, como correr, hacerme el pendejo olvidadizo, o decir que me lo “sembraron”...simplemente no había plan B de emergencia.
Dicen que pena es robar y que te cachen, no se quien lo dijo pero se equivoca, la adrenalina previa, pocas veces se compara con algún otro sentimiento, hubo de todo menos pena... pena la que nos aplicaron... 3 meses de servicio social en el departamento bibliográfico... afortunadamente las ñoras encargadas nos tuvieron compasión y nos trataron de pelos, aprendimos mucho leyendo libros y etiquetándolos y al final nos hicieron una despedida bastante agradable.
También dicen que no hay mal que por bien no venga, de eso estoy seguro, me conocí a mi mismo como no tienen idea y mas a mi pareja, trajo cosas muy buenas sin duda.
Es pecado robar un pan para un niño hambriento??? Claro que no!!!
Y que tal si ese niño tiene hambre de conocimientos???? Es pecado cambiar el pan por un libro??? Díganme por favor!
PERALOKA
3 comentarios:
Jajaj, che aArtur, esa no me la sabia, fijate que en la prepa yo di parte de mi servicio en la biblioteca torres bodet, tenian un monton de libros de donaciones en un bodega, los iban a quemar por que algunos estaban maltratadones, otros no eran aptos para exibir, habia un diccionario del diablo de 1742, por ahi dicen que el que quema libros no esta lejos de quemar personas, asi que yo decidi salvar cuantos pudiera, era abril, la biblioteca no tenia acceco al publico y el vigilante no revisaba nada, ¿eso me hace mas o menos delincuente que quienes los pretendian quemar?.
Pero en fin tu conciencia puede estar tranquila siempre y cuando tus intenciones fueran por estudio y conocimeinto y no como vandalismo puro, aun y cuando con esa accion pudiese haber dejado sin estudiar a otros, tu fin justificaba el medio.
Por otra parte es curioso como los libros usados escojen a su dueño a diferencia de los nuevos, los nuevos los ves en los estantes y da igual uno u otro, pero cuando ves libros usados parace que tienen vida propia, te gritan, aqui estoy esperndote, llevame contigo compañero, o es eso ¿o tengo que dejar de fumar chingaderas para que no me hablen?. en fin.
jajaja
che nyonyo, siq eu recuerdo eso, fue muy divertido
jejeje, lo mejor es que todo salio bien, hasta las meches los adoptaron como sus segundos hijos a ti y a la Naye, no?..jeje, chido. y no bro, no es pecado robar un libro...creo yo..
Simon, realmente se pueden sacar cosas muy buenas de algo así, y claro que tienes razon Homero, muchas cosas te hablan y tienen una historia detrás que intentan contarte, éllas te escogen a ti sin duda.
Me divertí mucho viendo libros de medicina forense con weyes desbaratados (mas educativo que Show No Mercy) y bueno, en verdad no tengo cargos de conciencia, el fin me justificó, no hubo vandalismo, simplemente soy un raterillo ñoño, es preferible mil veces robarlo que quemarlo...
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