Negro eres y en negro te convertiras

Un negro siempre será un negro, amenos que se apellide jackson por supuesto, y no, no lo digo como el nuevo descubrimiento científico que ha esperado la humanidad por siglos, ni como racismo tampoco. Simplemente los eufemismos son absurdos, pero los gringos no lo son menos, así que les encantan.

Para mi eso no es tacto, es simple y llanamente una estupidez, llamar asistente domestica a las gatas, sexo servidoras a las putas, afro americanos a los negros y nativos americanos a los indios, por poner algunos ejemplos, me parece una chaqueta mental, una babosada. ¿Cambiar esas palabras altera de alguna forma su condición de negros, de gatas o de putas?, Existen eufemismos por compasión también, ¿decir estoy “llenita” te quita lo gorda?, pero ese ya es otro tema.

Claro que existen estereotipos, expresiones peyorativas, pero forman parte del léxico de los mexicanos, aquí decirle negra a tu vieja es un cariño, no una provocación racista, el racismo se manifiesta de muchas diferentes formas pero no de esa. Y que el zorro impotente llame negros a los negros, como ya lo comento el acidete, me parece muy bien. Además es verdad, pinches negros gringos son guevones (y todavia viene seal a mexico a burlarse de nosotros casandose con hedidi "mamita" klum, eso si es racismo, bueno no, es envidia pero exigo que intervenga derechos humanos), igual que los puertorriqueños (gringos de closet),con sus excepciones claro esta, es objetividad no racismo y si no compruébenlo.

Pero claro es mas racista llamar negro a un cabron que acostado sobre carbón no se diferenciaría, -un negro que además es genérico, hipotético, supuesto, generalizado- , que levantar bardas en la frontera o permitir la actividad de escuadrones de la muerte en Arizona que maten indocumentados, estos si personalizados, con nombre y que van allá por hambre y por necesidad. O tener un alcalde hijo de nazis que gobierna bajo una política claramente racista, que lucha por eliminar los derechos mas fundamentales, no digamos ya de un emigrante, si no de cualquier ser humano, o mandar una horda de reprimidos, psicópatas y adictos a un país de oriente a matar a violar y destruir todo cuanto se les ponga en el camino.

Eso les pasa pinches gringos, -eso si fue racista-, por comer tantas hamburguesas de vacas locas y transgenicas , igual hasta vacas transexuales, no lo se, cambian las funciones orgánicas y se razona con el culo y se caga con la cabeza. Lo que habría que cambiar, mas allá de la salida fácil y absurda de la denominación, de la etiqueta, incluso mas allá de la igualdad, es el respeto por las diferencias.

Aunque aquí los hay también, el lunes pasado en GDL, al meter las monedas en la maquina del estacionamiento de la gran plaza se me ocurrió decir que abajo había dos judíos que contaban las monedas al caer, uno de mis tres acompañantes dijo “te voy a decir que no me gustan los chistes de judíos, el abuelo de mi madre era judío”, por supuesto me cage de risa, no es que fuera un chiste bueno ni que mi humor lo sea, pero hay que ver, ni judío era el güey y ya estaba de nena. Me seguí riendo y le dije, “una lastima por que se me unos buenísimos, pero te contare unos de pelmazos que se creen judíos, por cierto ¿ya te conté que corre sangre azul por mis venas? Un antepasado era caníbal y se trago a un rey”. Los otros dos se carcajearon y el no hablo por un buen rato. Yo lo veía despacito, con mi mueca castrosa, con la mala leche que me sale especialmente los lunes cuando alguien no me simpatiza mientras pensaba “A mi se me hace que su madre tuvo que ver con un gringo...”

HOMERO